Esas Chicas
31/01/2013
Años llevaba deseando encontrar un momento para conocer a Rosa.
Es de esas mujeres que cada vez que leia algo de ella me prometía que
tenía que conocerla, pero por unas cosas o por otras nunca llegaba ese
dia.
En la fiesta de navidad la conocí en persona y me gustó, su cuerpo y sobre todo su forma de ser y de estar.
Y hoy, antes de que acabe este mes de enero, con la pertinaz sequía sexual que me asola, la llamé y quedé.
Y tengo que reconocer que es una grandisima persona, una mujer
encantadora, dulce cariñosa, cercana y tremendamente sensual y sexual.
He podido practicar con ella muchas fantasías, pero lo que se me quedará
grabado por mucho tiempo es esa mirada, esos ojos que te lo dicen
todo, que te sonrien y que te camelan, esos ojos que no se apartan ni
cuando hablas ni cuando follas. Me gustan las mujeres que te miran y te
desarman, porque ya no puedes hacer nada más que darles placer y ser
(por lo menos durante un rato) su mejor amante.
Y de los ojos para abajo, la cosa mejoraba y mejoraba.
Me gusta Rosa.
He disfrutado.